"La Esencia Del Ser Humano"
No eres los pensamientos, eres el espacio desde el cual surgen los pensamientos. ¿Y qué es ese espacio? Es la conciencia misma. La conciencia que no tiene forma. Todo lo demás en la vida tiene forma. En esencia somos esa conciencia sin forma que está detrás de los pensamientos.
Hay una potencia en el alma y no sólo una potencia sino [una] esencia y no sólo [una] esencia sino algo que desliga de la esencia. Somos alma, cuerpo, razón y amor, y el amor hace milagros en las personas, cambia las actitudes, porque el amor cambia los sentimientos y porque el amor cambia los pensamientos.
Hay una potencia en el alma y no sólo una potencia sino [una] esencia y no sólo [una] esencia sino algo que desliga de la esencia. Trae el hombre recluso en el alma una eternidad, y algo puede aprender el hombre en esta eternidad con respecto a la esencia de su alma misma.
La esencia de la vida espiritual está formada por nuestros sentimientos y nuestras actitudes hacia los demás.
Dalai Lama
Como el inicio de todo, nos remontamos a la historia de la humanidad y de nuestros antepasados y retrocedemos nuevamente al principio de los tiempos, porque la explicación del origen de nuestra vida está en el inicio de la historia. Si queremos avanzar en el conocimiento solo necesitamos retroceder en el tiempo y encontraremos la esencia de lo nuestro:
Dios, como único Creador de cuanto ser vivo existe, y como la Máxima expresión de los dones del amor y de la libertad.
Esencia del ser
Conjunto de características permanentes e invariables que determinan la naturaleza de un ser: Lo que constituye la naturaleza de las cosas y representa en ellas lo permanente e invariable.
La palabra esencia viene del latín essentia que a su vez proviene del infinitivo del verbo latino esse, ser=existir, cuyo participio ens es el ente como ser que existe.”, Término que fue usado por primera vez por Cicerón para traducir el término griego de οὐσία (“ousía”) que viene del participio presente activo del verbo εἰμί o “ser” (ὤν, οὖσα, ὄν,)
La raíz indoeuropea es *es- como se puede ver en el griego εἰμί “eimí”(que antiguamente era “esmí”), el hitita “eimi”, el sánscrito “asmi” y el gótico “imi”
Etimología y significado
Essentia en la filosofía tradicional se ha interpretado como sustancia, con un doble sentido:
- Sustancia primera es el individuo que muestra que es: que existe y muestra su existencia.
- Sustancia segunda es la clase lógica que enuncia mediante un discurso lo que es: el atributo de la sustancia primera que muestra su identidad permanente. Lo que introduce las siguientes correlaciones:
En lógica de primer orden lo respecto al conocimiento de los hechos de experiencia mediante la designación de los individuos conocidos.
En lógica de segundo orden, es respecto al conocimiento de lo real como realidad, es decir la definición científica que considera como objeto de su estudio la esencia o propiedad, o conjunto de propiedades que define una clase natural. En la filosofía tradicional la esencia ha sido considerada como la propia e indisoluble identidad de las cosas frente a la apariencia fenoménica de la experiencia, lo que situaba a la esencia en una realidad metafísica. Actualmente, no se considera la metafísica dentro del ámbito de la ciencia. Lo real de las esencias deviene solamente objeto de especulación, como tendencia al esencialismo.
La esencia es la propiedad, o conjunto de propiedades, que constituyen a una clase natural o a un individuo. La ciencia considera las propiedades que se manifiestan en la experiencia o experiencia posible, como predicados de un conjunto de individuos que tienen dicha propiedad en común; es decir una clase lógica. De este modo el objeto de estudio adquiere una dimensión universal referida a un universo de posibilidades en el mundo, siendo el sujeto gramatical de su discurso la propiedad, o conjunto de propiedades que pretende significar, de forma directa o de forma derivada, una clase natural.
Cada ciencia por ello distingue su objeto material y su objeto formal. El avance teórico, la reflexión sobre lo general como modelo, exige la comprobación en lo concreto y material en el experimento o en las inferencias materiales que puedan deducirse de la teoría.
La esencia en la filosofía de la antigüedad clásica
Sustancia, predicados, categorías y predicables artículos principales: Sustancia, Predicado (lógica), Categoría y Predicable. Platón consideró la "esencia" según el segundo sentido señalado en la introducción, como ίδέα (idea) o forma eterna e inmutable de las cosas materiales y sensibles con un sentido metafísico, realista y trascendente. Considera las ideas como esencias separadas, verdadera realidad que es. Las ideas son modelos de las cosas materiales y éstas únicamente son por participación y no constituyen verdadero ser.
El verdadero introductor de la esencia en la doble dimensión señalada anteriormente es Aristóteles. Aristóteles, a diferencia de Platón, parte del hecho de la existencia de la sustancia primera (ούσία), que es la sustancia propiamente dicha. Mientras la sustancia primera (sujeto de todos sus predicados) permanece en la existencia a través de los cambios (como desarrollo de su forma sustancial) permanece su identidad como 'sustancia segunda (sus predicados esenciales, su esencia).
Esta identidad son predicados que están indefectiblemente unidos a la sustancia primera en su devenir existencial. Y son:
- el género
- la diferencia específica
- la propiedad
Aristóteles considera el όρος o definición como κατηγορούμενα; uno de los predicables que lo define como predicado convertible con el sujeto de forma esencial.
Pero el hecho de considerar la esencia como predicado genera un cierto problema de interpretación:
Los predicados esenciales no individualizan la predicación, sino que expresan lo esencial de un género o especie.
La esencia en la edad media
La tradición neoplatónica del cristianismo subrayó el sentido platónico primitivo, pues las esencias se constituían como ideas subsistentes en la mente divina principios de la creación conforme al plan de su Divina Providencia, manteniendo de esta manera su sentido metafísico.
Pero en Latín ούσία se tradujo mediante el término hipóstasis como sustancia primera. Y la sustancia segunda se tradujo como essentia derivándola del infinitivo del verbo esse que también tiene el sentido de existir. Así San Agustín, De Trin, V ii, 3 :Esencia se dice de aquello que es ser (ab eo quod est esse dicta est essentia). Lo mismo que sapientia que proviene desapere y scientia de scire.
Mediante esta traducción se puede confundir entonces el ser, ESSE (de la sustancia primera) y el ESSE (de la sustancia segunda) como proviniendo ambos sentidos del mismo principio. De este modo los cristianos al considerar a Dios principio absoluto:
- En el hecho del existir (creación de la nada).
- En la constitución del contenido como forma de la esencia, corresponde a Dios todo el fundamento de uno y otro sentido como Ser que Es; ideal que fundamenta la creencia en el Dios creador cristiano.
Boecio, en su intento de recuperar el pensamiento de Aristóteles y sintetizarlo con la tradición platónica cristiana, considerará la esencia como forma y como natura. Forma en cuanto puede ser objeto del entendimiento y por tanto objeto de definición. Natura en cuanto constituye al ser como principio causal de la creación. Lo que da origen a la problemática posterior sobre la esencia en los siglos siguientes.
Ser posible (ser de esencia) - Acto de ser (existencia)
La reintroducción del pensamiento de Aristóteles en occidente a través de los árabes, siglo XI, abre nuevas perspectivas y plantea diversos problemas:
Artículos principales: Problema de los universales, Avicena, San Anselmo, Santo Tomás de Aquino y Duns Scoto. La utilización del término esencia, a partir del infinitivo latino “esse”, tal como introdujo San Agustín, suscita diversos problemas al aplicar dicho concepto a Dios. Pues Dios no puede considerarse como una cosa más y sin embargo es más existente que todas las demás cosas. Esto adquiere especial relevancia al recuperar el pensamiento aristotélico a partir del siglo XI. Para algunos medievales, junto con el esse infinito perfecto de la idea del Ser platónico, existir es ante todo el esse, entendido como “actualidad”, subsistens. En Dios se mezclan los dos sentidos en un solo y único término lingüístico. El problema de la esencia no es simple. Los escolásticos la trataron con mucho detalle, pues consideraron la esencia en tres modos posibles: en la cosa, en el concepto y en sí misma valorándose de una u otra forma según se subrayara un aspecto u otro de la cuestión.
- Avicena consideró que la existencia (esse) era un accidente de la esencia (quidditas) para los seres creados. La existencia remite entonces a una esencia posible, a diferencia de la esencia necesaria que es Dios.
- San Anselmo construyó el famoso argumento ontológico que tanta influencia ha tenido en el racionalismo considerando que en Dios la esencia incluye la existencia como una propiedad más, una perfección.
- Averroes consideró que no había distinción alguna entre esencia y existencia.
- Alejandro de Hales no admitió una distinción real entre esencia y existencia sino únicamente una distinción de razón.
- Enrique de Gante consideró una distinción intencional. Será Santo Tomás quien aplicando un esquema analógico al aristotélico de potencia-acto, sintetizará la cuestión en la distinción real entre ser de esencia y ser de existencia, rechazando el argumento ontológico de San Anselmo.
Para Santo Tomás la distinción real entre esencia y existencia en los entes creados no significa que la existencia sea un mero accidente de la esencia. La existencia puede proceder de una causa eficiente trascendente a la esencia (Dios creador, en quién esencia y existencia coinciden) y no ser un “agregado” o accidente de la esencia, sino un acto de la esencia a partir de su ser en potencia como posible.
Tal es el sentido de la “creación” del mundo a partir de las esencias como ideas divinas (Divina Providencia) y de las existencias como sustancias individuales en el mundo sensible y material como movimiento por la acción de las causas. Lo que hace posible argumentar la existencia de Dios a partir de la existencia de las criaturas, como IPSUM ESSE SUBSISTENS. Tal es el acierto de la síntesis tomista entre la tradición neoplatónica cristiana y el aristotelismo incorporado a la filosofía occidental a partir del siglo XIII.
La esencia en la filosofía de la edad moderna
En la filosofía tradicional el origen y fundamento se busca en el “objeto de conocimiento”, y el fundamento se encuentra en lo real, designado como “ser” y comprendido como “realidad”. Ahora el origen y fundamento de la reflexión es la reflexión misma en la conciencia, el pensamiento.
El Objeto
Se concibe como realidad a partir del propio pensamiento Como sustancia se comprende de igual forma que en la filosofía tradicional; pero su realidad es considerada, en principio, como mero objeto de experiencia subjetiva. De este modo la sustancia, como sustancia primera, es concebida de dos modos:
- Racionalistas: Como idea cuyo concepto es: “Aquello que no necesita de otra cosa para existir”.
- Empiristas: Como idea cuyo concepto es: “Idea que resulta de la asociación de otras ideas simples como predicados de ella”.
Y la esencia, como sustancia segunda es concebida como posibilidad de existir, de tres formas diferentes:
- 1 Como posibilidad intrínseca, en cuyo caso:
- 1.1 O bien la posibilidad de existencia se realiza mediante un principio de razón suficiente en un mundo de con posibilidad basado en la identidad de las sustancias.
Decir que ciertas esencias tienen una inclinación a existir y otras no, es decir algo sin razón, pues la existencia parece estar universalmente relacionada con cada esencia del mismo modo. Llamaremos a esa condición formal y pura de la sensibilidad, a la que se halla restringido el uso de los conceptos del entendimiento, esquema de esos conceptos y denominaremos esquematismo del entendimiento puro al procedimiento seguido por el entendimiento con tales esquemas.
Tales esquematismos hacen posible la consideración del objeto como:
Esquema
|
Objeto como
|
De la cantidad
|
Número
|
De la realidad
|
Cuántico
|
De la sustancia
|
Sustrato
|
De la causa
|
Sucesión de lo diverso
|
De la comunidad
|
Interacción entre sustancias
|
De la posibilidad
|
Determinación de algo en el tiempo
|
De la realidad
|
Existencia en un tiempo determinado
|
De la necesidad
|
Existencia en todo tiempo de un objeto
|
La tabla de las categorías nos lleva con la mayor naturalidad a la tabla de los principios, ya que ésta no es otra cosa que las reglas del uso objetivo de aquéllas. Para que sea posible la experiencia y sea posible la expresión de la múltiple diversidad de la experiencia sensible en un juicio sintético a priori, el entendimiento posee unos principios a priori de la posibilidad de la experiencia.
Analogia de la experiencia
- Permanencia de la sustancia a través del cambio
- Ley de causa-efecto reguladora del cambio
- Acción recíproca en la simultaneidad de las sustancias
Lo que permite el conocimiento del objeto como sujeto permanente de sus predicados y sus relaciones con lo demás como sustancia, si bien ésta únicamente encuentra su referencia en los límites de la experiencia posible según. Los postulados del pensar empírico:
- Lo que concuerda con las condiciones formales de la experiencia es POSIBLE
- Lo que está en interdependencia con las condiciones materiales de la experiencia es REAL
- Lo determinado por las condiciones universales de la experiencia es NECESARIO.
En última instancia la sustancia como objeto y su esencia como concepto y su expresión de predicados en juicios, queda reducida a la síntesis del contenido material de las intuiciones sensibles de la experiencia, elaborada por el entendimiento conforme a sus intuiciones puras de espacio y tiempo, sus esquematismos y la aplicación de sus conceptos puros o categorías conforme a sus propios principios. La escisión Naturaleza-Espíritu, entendido este último como auto conciencia, como capacidad de “ser para sí”, (que se manifiesta en la raíz indudable del pensamiento cartesiano: “pienso, luego existo”), establece sin duda alguna la primacía del espíritu en los diversos idealismos. Superación de todas las oposiciones en la unidad del Absoluto. Absoluto que es Naturaleza y Espíritu, una unidad donde se manifiesta la Verdad Absoluta como Sistema.
Y en el sistema la esencia ocupa una función capital: La esencia es la verdad del ser. La esencia no consiste en algo negativo (que no-es pero es posible, es decir como algo exterior al ser), sino como lo que hace posible el movimiento propio, infinito, del ser. La esencia es el lugar intermedio entre el ser y el concepto. La mediación del Ser y el concepto como verdad y resultado es la esencia. La esencia, a su vez, dialécticamente, se desarrolla en tres fases:
- Aparece en sí como reflexión y es esencia simple en sí, como determinación del ser.
- Como esencia que emerge a la existencia, como ser posible.
- Esencia que forma unidad con su aparición, como realidad.
Ontologismo
Una nueva fundamentación de las esencias, como restauración del catolicismo frente al empirismo e idealismos del XIX, es el intento de Rosmini. El principio del que se parte es de la “esencia del ser” como forma del pensamiento que hace posible el conocimiento: El hombre piensa el ser de un modo universal (Nuovo saggio, Ed. Castelli, § 399) de modo que nacemos con la presencia y con la visión del ser posible .
Las esencias no son una hipóstasis de lo sensible, pero constituyen el verdadero mundo objetivo humano, y el pensamiento lo aplica a lo real, no de forma psicológica (como en el empirismo) ni constructiva (como en el idealismo) sino “naturalmente”. De esta forma el mundo es objetivo e inteligible.
La esencia en el pensamiento contemporáneo
Superado el idealismo del siglo XIX y consolidado el valor de la verdad científica por vía de los hechos en el dominio de la naturaleza, el pensamiento contemporáneo, parte del hecho de la experiencia en sí misma como fenómeno y del carácter intencional de la conciencia. Se concluye de modo general que no es posible un conocimiento directo sino interpretativo y por medio del lenguaje como segundo sistema de señales. La prioridad de la esencia sobre la existencia, conduce al idealismo, pero la ignorancia de la esencia conduce a un universo como conjuntos de existencias desarticuladas y sin jerarquía de un orden.
Las esencias comprenden tanto las formas sensibles como intelectuales y constituyen un lenguaje que enuncia algo acerca de lo que es y que expresa una experiencia de lo real. Como el inicio de todo, nos remontamos a la historia de la humanidad y de nuestros antepasados y retrocedemos nuevamente al principio de los tiempos, porque la explicación del origen de nuestra vida está en el inicio de la historia. Si queremos avanzar en el conocimiento solo necesitamos retroceder en el tiempo y encontraremos la esencia de lo nuestro: Dios, como único Creador de cuanto ser vivo existe, y como la Máxima expresión de los dones del amor y de la libertad.
Somos alma, cuerpo, razón y amor, y el amor hace milagros en las personas, cambia las actitudes porque el amor cambia los sentimientos y porque el amor cambia los pensamientos.
Alexa Ch
Fuente: Monografias